Cuando hablamos de la dilatación del parto nos referimos principalmente a la desaparición del cuello del útero junto con su progresivo ensanchamiento. ¿Cuál es el objetivo? Permitir el paso del bebé en el momento del parto.
Se trata de la primera fase del nacimiento del bebé y además la más larga. Pero, vayamos poco a poco. A lo largo de las siguientes líneas queremos que resuelvas todas tus dudas sobre este inolvidable momento.
¿A qué nos referimos con dilatación del parto?
En primer lugar debes saber que el momento del parto se compone de 3 fases: fase de dilatación, fase de expulsivo y fase de alumbramiento.
Imagina tu útero como un puño cerrado que durante el embarazo ha protegido a tu bebé. En el momento en el que empieza la fase de dilatación ese puño comienza a “eliminarse” lo que se conoce como “borramiento”. ¿Cómo? Las fibras musculares se van haciendo cada vez más y más finas hasta que ese puño deja de existir dando lugar a un hueco de un máximo de 10cm que dará paso a la cabecita de tu pequeño/a.
Tu matrona o ginecólogo/a irá controlando tu dilatación a través de tactos o exploraciones vaginales. Utilizando sus dedos índice y corazón a modo de tijera comprobará cuánto pueden abrirse dependiendo de la dilatación que se vaya consiguiendo. Se palpa un círculo y se calcula su diámetro.
Hablamos de que el cuello está “permeable uno o dos dedos” cuando se encuentra ligeramente dilatado. A partir de ahí comenzarán a cuantificar la dilatación en centímetros.
¿Qué sentirás en la dilatación del parto?
Según la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) la fase de la dilatación del parto está formada a su vez por otras dos etapas: la fase latente o pasiva y la fase activa. Te ayudamos a diferenciarlas.
Fase latente o pasiva
En este primer momento comenzarás a sentir contracciones de manera irregular.
Espera, ¿qué son las contracciones? Podríamos definirlas como “el motor del parto”. Se trata de las fuerzas imprescindibles que impulsan al bebé desde el útero hasta el canal del parto gracias a hormonas como la oxitocina y las prostaglandinas. Tranquila, no las vas a confundir con las pataditas de tu bebé.
Sentirás las contracciones como una especie de calambre o dolor menstrual fuerte de duración variable. Suelen ser dolorosas, no obstante cada mujer las vive de una determinada manera. Algunas aplicaciones móviles para embarazadas pueden ayudarte a cuantificar su duración e intensidad.
“¿Debo acudir al hospital inmediatamente?” – pensarás. No, lo ideal es que te mantengas en casa el máximo tiempo posible durante esta fase debido a lo larga que puede llegar a ser (puedes ganar los primeros 3-4cm en alrededor de 8 horas). En este tiempo es recomendable que te mantengas hidratada pero se desaconseja ingerir alimentos sólidos. Respira, mantén la calma y… ¡Recuerda coger la bolsa del hospital junto con tu plan de parto antes de salir corriendo al hospital una vez las contracciones sean más seguidas!
Fase activa
Como su nombre indica, se trata de un momento activo en el que las contracciones se producen con mayor asiduidad haciendo que la dilatación cobre ritmo. Tanto es así que dilatarás en torno a 1cm/hora (si eres primeriza) y 1,5cm/hora (si no es tu primer parto) hasta llegar al máximo de 10cm de dilatación. Digamos que esta fase es como la antesala del parto.
En este momento sentirás que las contracciones son más rítmicas, tienen mayor intensidad y son más dolorosas. Se trata de una fase mucho más rápida en la que pasarás de los 3 a los 10cm de dilatación.
Varía mucho en mamás primerizas donde se produce primero el borramiento y luego la dilatación con una media de duración de 8-12 horas. En mamás multíparas se producen ambos sucesos simultáneamente haciendo que la duración sea de 5-8 horas.
Trucos para favorecer la dilatación y que el parto sea más rápido
Llegados a este punto puede que estés pensando: “Vale, hasta aquí todo bien, pero… ¡quiero que este proceso sea lo más rápido e indoloro posible! ¿Hay algo que pueda hacer?”
Sí, respirar y mantener la calma. Y de nuevo, sí, lo sabemos. Somos conscientes de que la teoría parece sencilla pero lo complicado puede darse a la hora de llevarlo a la práctica.
¡Que no cunda el pánico! Para el dolor ten en cuenta que puedes hacer uso de la epidural si sientes que las contracciones son demasiado intensas siempre y cuando tu dilatación oscile entre los 4 y los 8cm.
No obstante queremos dejarte unas recomendaciones para que vivas tu parto de la manera más natural posible.
Ejercicio físico
La actividad física es beneficiosa a lo largo de los tres trimestres de embarazo siempre que se vaya adaptando tanto a tus necesidades como a tus preferencias. No solo te ayude a relajar los músculos, sino que te distrae del dolor y te hace sentir segura y tranquila. ¡Así que haz cualquier cosa salvo quedarte tumbada!
Caminar de manera diaria, sentarse encima de una pelota de Pilates para trabajar el movimiento y bascular la pelvis, hacer sentadillas, ponerse de cuclillas, bajar escaleras o bailar balanceando las caderas son actividades beneficiosas. Con ellas no solo podemos tonificar el suelo pélvico, sino que favorecemos la colocación del bebé, estimulamos la producción de oxitocina y por ende, ayudamos en la dilatación del parto.
Aquí puedes profundizar más sobre ejercicio físico en el primer trimestre, ejercicio físico en el segundo trimestre y ejercicio físico en el tercer trimestre.
Agua caliente
El agua caliente ayuda a que te relajes y reduzcas tu estado ansioso. Influye en la dilatación aumentando la sensación de control y reduciendo el dolor. Aquí puedes leer más sobre el parto en el agua.
Momentos en pareja
El papel de la pareja en el embarazo y en el parto es fundamental. ¿Quién te va a ayudar y arropar mejor en tan íntimo momento? Sus masajes, abrazos, caricias te ayudarán a mantener la calma favoreciendo la liberación de oxitocina.
Además para aliviar el dolor del parto tu pareja puede ayudarte con algún masaje, aplicando calor local… Recuerda además que el líquido seminal contiene prostaglandinas que ayudar a madurar el cuello del útero. De ahí que mantener relaciones sexuales durante el embarazo no solo no está “prohibido” sino que es aconsejable siempre y cuando el ginecólogo no considere lo contrario.
Calma y ambiente relajado
Aquí te dejamos el mantra de María, nuestra fisioterapeuta especializada en salud femenina, quien repite hasta la saciedad que: “Tu cuerpo está preparado para parir y tu bebé está preparado para nacer”. Repítelo y sobre todo créetelo. Esto te hará estar tranquila y evitará los nervios y los miedos del embarazo.
Como curiosidad hemos de decirte que tu cerebro cuando estás nerviosa genera cortisol y adrenalina. Hormonas opuestas a la oxitocina que te ayuda con la dilatación. De ahí que mantener la calma y cuidar la salud emocional durante el embarazo y el parto sea de vital importancia.
Música relajante, ambiente tranquilo, técnicas de relajación,… Deja que fluya.
Una vez más desde SingularMom instamos en la importancia de la información. Que sepas con exactitud a qué te estás enfrentando y qué puedes hacer en cada momento para favorecer tu bienestar y el de tu bebé son nuestras prioridades.
De todo ello nos encargamos con nuestras clases de preparación al parto online.
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